Si digo que no te quiero, me estoy mintiendo. Si digo que no te amo, me estoy engañando. Mas jamás negaré lo que por tí siento. Es increíble lo que siento por ti, no cabe en mi pecho, en mi cuerpo, en mi mente, ni en mi corazón.
Solo Dios y yo sabe que siento por ti, mi gordo. Solo Dios sabe cómo vibra mi cuerpo de tan solo verte, mirarte, escucharte. Mi piel quiere desprenderse de mi cuerpo, el corazón no encuentra cómo ubicarse, arreglarse.
Gracias dio al cielo porque en tres años me diste momentos memorables que recuerdo día tras día, que no puedo sacar de mi mente y que solo ellos mantienen vivo este sentimiento por ti.
Fuiste muy duro conmigo y con lo que me dijiste, pero sé que Dios te perdonará porque yo me quedé con lo mejor tuyo: Un bebe.
Te amo por sobre todas las cosas y jamás olvidaré cada momento que vivimos.