Pensando en ti

Si digo que no te quiero, me estoy mintiendo. Si digo que no te amo, me estoy engañando. Mas jamás negaré lo que por tí siento. Es increíble lo que siento por ti, no cabe en mi pecho, en mi cuerpo, en mi mente, ni en mi corazón.

Solo Dios y yo sabe que siento por ti, mi gordo. Solo Dios sabe cómo vibra mi cuerpo de tan solo verte, mirarte, escucharte. Mi piel quiere desprenderse de mi cuerpo, el corazón no encuentra cómo ubicarse, arreglarse.

Gracias dio al cielo porque en tres años me diste momentos memorables que recuerdo día tras día, que no puedo sacar de mi mente y que solo ellos mantienen vivo este sentimiento por ti.

Fuiste muy duro conmigo y con lo que me dijiste, pero sé que Dios te perdonará porque yo me quedé con lo mejor tuyo: Un bebe.

Te amo por sobre todas las cosas y jamás olvidaré cada momento que vivimos.

Tu piel

Hoy es un día en el que quisiera desaparecer en el aroma de tu piel, de poder disfrutar de tu sexo, de tu masculinidad, de ese color que hace que suba a las nubes y no quiera bajar.

Eres mi medicina, mi antídoto, pero también mi enfermedad.

Soy tan frágil entre tus brazos.

Déjate.....

De tan solo pensar tu nombre me engranujo, mi cuerpo vibra, se estremece, me dice que te busque, que te llame para que te ame y tu a mi, en un movimiento sensual y provocador que solo lo siente mi ser y que solo tú podrías ver.

Acércate a mí, déjame demostrarte lo que siento por ti, lo que puedo llegar hacer por ti. Déjame saciar esta sed de ser tu amante, de devorarte con mis besos, con  mis labios, que cada poro de tu piel pueda vibrar junto a mi cuerpo, que se vuelvan uno sumergidos en el sexo, en el placer.

Déjate guiar por el momento, por la pasión que sentimos, deja que el momento sea el que diga lo que puede pasar, deja que tu cuerpo se exprese, que con las acciones puedas describir lo que hay en tu corazón.

Ven y sumérgete en este mar de pasión que solo dos almas que se aman podrían disfrutar, porque es un solo lenguaje que, aunque sea común, tiene códigos diferentes, que solo los amantes de momentos, como tu y yo, pueden descifrar.